La ruta por el valle de Barrosa nos permite recorrer un espectacular valle de origen glaciar, en el que la geología se ha conjugado desde hace más de 300 millones de años para crear depósitos minerales que fueron explotados desde tiempos antiguos hasta principios del siglo XX. En nuestro recorrido podremos apreciar vestigios de una época pasada, en la que la minería se convirtió en uno de los motores de la economía del valle de Bielsa. Si tenemos curiosidad sobre el patrimonio minero de la comarca de Sobrarbe, podremos disfrutar en otra jornada, del Itinerario Geo-Minero que nos propone el Geoparque Sobrarbe-Pirineos, es un indispensable. Puedes descargarlo desde este enlace.

El punto de partida de la ruta está justo pasado el punto kilométrico 88 de la carretera A-138, carretera que une las poblaciones de Ainsa con el túnel de Bielsa, túnel que nos permite llegar hasta Francia. Una vez pasado Bielsa, atravesaremos el núcleo de Parzán y unos kilómetros más adelante, encontraremos a mano izquierda, un pequeño apartadero en la carretera, en estas que os dejamos. Aquí empieza una pista, empinada al principio, que nos conducirá hasta el Circo de Barrosa.

Entre bosques de pino albar, siempre a la derecha orográfica del río Barrosa, remontaremos el valle hasta ganar espectaculares vistas sobre la vertiente este del macizo de La Munia, montañas de más de 3.000 metros que cierran el valle y marcan la frontera con Francia.

Desde el refugio de Barrosa solo quedaba abrir una interminable huella, sobre la abundante nieve, para alcanzar el Puerto de Barrosa, paso histórico a Francia a 2534 m de altitud. Este puerto era utilizado por los ingenieros franceses cuando venían a trabajar a las citadas minas, además de algún que otro contrabandista, maquis y otros viajeros que venían a esta parte del Pirineo.

Desde allí, unos 300 metros más de desnivel nos llevan a nuestro destino, el pico del Puerto de Barrosa. Ni que decir que las vistas desde la cima, en un día despejado como el que tuvimos la suerte de disfrutar, son espectaculares: los Lacs de Barroude bajo el Pic de Troumouse, el Robiñera, el Puerto Viejo, el Circo de la Pinarra… 360º de panorámica para deleitarse. Ya solo nos quedaba disfrutar del momento y de la posterior bajada.